Las referencias más recientes son Los Juegos del Hambre o Divergente con un espíritu similar a El señor de las moscas, pero lo cierto es que a mi me hizo recordar mucho a la saga de Mundo del Río, del escritor Phillip José Farmer (que jamás ha tenido una adaptación digna) con sus personajes históricos despertando en un mundo alternativo. Acá son un grupo de adolescentes, rigurosamente masculino, que aparece uno por mes en un campo rodeado por altas murallas y del que parece que sólo se puede salir cruzando un obsceno laberinto. Si bien hay pocos apuntes de interés en los personajes, mientras el misterio permanece, entretiene (aunque cabe preguntarse como un grupo de entre 12 y 19 años viven sin la menor pulsión sexual, incluso cuando aparece finalmente una chica). Los problemas, de peso, llegan con el final y la explicación, que son de un caos y absurdo letales. Y que encima queda abierta a una secuela (que se desarrolla solamente si esta entrega tiene éxito, cosa que yo en lo personal dudo) así que en definitiva no cierra nada. Nos quedamos en un muy apenas 2 por alguna secuencia y alguna carrera en el dichoso laberinto. Por Fito.
Puntajes:
Federico:
Fito: 2
Gastón:
Leo:
Martín:
Rodrigo: 1
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