Última temporada de esta serie mayúscula. The Wire es una serie policial con un trasfondo social casi tan complejo como la vida misma. Es como si los escritores hubieran tomado un tratado de sociología (o todos los tratados juntos) y hubiesen plasmado una teoría acerca de como se genera, se desarrolla y se perpetúa el mundo del crímen, con personajes buenos y malos actuando en ambos lados de la vereda. La última temporada explora una de las pocas aristas que quedaban sin explorar, el periodismo. Si consideramos que The Wire había hecho incapié en el mundo de la policía, de los narcos, de los gremios laborales, de la educación, de la política y la justicia y ahora se mete con el periodismo, puedo decir, sin temor a equivocarme, que sólo le faltó meterse con la salud y tenemos todos los ángulos que hacen mover una sociedad moderna. Quizás el intento de meterse con el periodismo sea el punto más flojo de esta temporada, al fin y al cabo uno está esperando ansiosamente lo que sucede con los personajes que se han venido desarrollando de hace varias temporadas y lo del periodismo, por momentos, se siente como una intromisión molesta. Como buena última temporada, hay momentos para la autoreferencia que, en este caso entran perfectamente bien y son un premio para el fiel espectador, uno de ellos es el "funeral" a McNulty. La guerra Marlo-Omar es imperdible, y el final, que duele, es justo y consecuente con lo planteado por la serie. Quiero decir que esta temporada está, probablemente un escalón por debajo de la anterior, pero mientras escribo esta reseña y repaso los episodios mentalmente, me doy cuenta de que incluso así no puedo darle menos que un 5. Por Gastón.
Puntajes:
Federico:
Fito: 5
Gastón: 5
Leo:
Martín:
Rodrigo:
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